El enorme cabreo de Pedri con sus compañeros en el Allianz

Pedro González, Pedri, dio una lección de buen fútbol en el Allianz Arena. Su primera parte fue de libro. Memorable. Sin embargo, el centrocampista canario acabó muy molesto con la derrota. El Barça perdió la gran oportunidad de romper el maleficio de Múnich y todo el plan de Xavi se desmoronó en apenas 10 minutos. Los primeros de la segunda parte.

Futbolista con mucho talento, Pedri lee perfectamente los partidos. Y en Múnich detectó mucha precipitación y errores de sus compañeros. La ansiedad fue el gran enemigo del Barça tras el primer gol local.

Los señalados

Pedri, cada vez más líder, llamó la atención a Arujo y Raphinha en algunas acciones. Les recriminó que se precipitaran al subir hacia el ataque cuando tocaba amansar el partido.

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Robert Lewandowski abraza a Pedri González tras la derrota contra el Bayern / EFE

Tras el gol de Lucas Hernández, el Barça quedó muy tocado. Quiso resolver el partido por la vía rápida y descuidó su portería. El claro ejemplo fue el segundo gol de Sané. Cuando tocaba mantener la calma, el equipo se desquició.

Dominio de las áreas

El Bayern, superado en la primera parte, resolvió en dos acciones. El Barça jugó mejor, pero no dominó las áreas. Estuvo blando en la suya y desacertado en la del equipo alemán.

Al acabar el partido, Xavi destacó: "Esto no va de jugar bien, sino de ganar. Tenemos que competir mejor". Las palabras de Xavi reflejaron la impotencia de un Barça que quiso pero no pudo. Y Pedri, el mago del equipo, lo vio todo muy claro en el campo.