Melanie Serrano, anunciando su retiro del fútbol, en una rueda de prensa / FCB

Melanie Serrano, anunciando su retiro del fútbol, en una rueda de prensa / FCB

Culemaníacos

Melanie Serrano reivindica la lucha por la igualdad de género antes de retirarse

La leyenda del Barça Femenino quiere seguir ayudando al club azulgrana

20 mayo, 2022 20:48

Melanie Serrano es sinónimo de lucha y superación. La leyenda del Barça Femenino ha vivido la transformación de la sección hasta alcanzar unas cotas que pocas personas habrían imaginado. Hace una semana, la jugadora de 32 años anunció que va a colgar los botines al finalizar la presente temporada. Sin embargo, su implicación en el fútbol femenino va a seguir después estos partidos restantes con el equipo, que mañana va a por su segunda Champions League contra el Olympique de Lyon.

La experimentada futbolista ha sido clara en su lucha por la igualdad de género. En la rueda de prensa donde anunció su retirada del fútbol, declaró lo siguiente: “Le quiero agradecer a mi madre y a mi abuela por ayudarme a luchar a jugar un deporte en el que, por aquel entonces, no estaba bien visto que lo practicaran las mujeres”. Además, remató con una frase contundente: “Por la igualdad de género”.

Melanie Serrano, una de las principales leyendas del Barça Femenino / FCB

Melanie Serrano, una de las principales leyendas del Barça Femenino / FCB

Melanie Serrano, una de las principales leyendas del Barça Femenino / FCB

Su madre, la principal inspiración

Durante una entrevista con el diario El País, Melanie Serrano contó las dificultades que tuvo para adentrarse al fútbol. “Al principio, lloraba todos los días. No aguantaba más y le dije a mi mamá que me apuntara para jugar al fútbol. En Andalucía estaba todo el día con el balón”, explicó la lateral zurda del conjunto azulgrana, que añadió que su madre tenía limitaciones a nivel económico.

Posteriormente, la jugadora señaló que “en el Deportivo Blanes me dijeron: ‘Realiza una prueba y, si la haces bien, le digo a tu madre que no tiene que pagar nada’. Así empecé. Me llamaron para jugar en la selección catalana y a los 14 años me fichó el Barça”. A partir de allí se fue gestando su exitosa carrera como azulgrana, aunque tuvo que pasar ciertos baches hasta lo que es actualmente el Barça Femenino.

La transformación del Barça Femenino

En este sentido, Melanie Serrano indicó que el Barça tenía unas condiciones diferentes para el equipo femenino. “Jugaba en campos de tierra, entrenaba a altas horas de la noche, compartía campos con otros cuatro equipos y llevaba ropa tres tallas más grande”, recordó en su acto de despedida.

Melanie Serrano, durante el histórico partido del Barça Femenino en el Camp Nou FCB

Melanie Serrano, durante el histórico partido del Barça Femenino en el Camp Nou FCB

Melanie Serrano, durante el histórico partido del Barça Femenino en el Camp Nou / FCB

El primer triunfo de Serrano y su generación fue reestructurar el femenino de la mano de Xavi Llorens, primer entrenador de Messi en el Barça. Pero también hubo que sufrir. El equipo descendió. Cuando regresó a Primera, llegaron los títulos, primero la Copa (2011) y después cuatro ligas consecutivas (2012, 2013, 2014 y 2015). Los éxitos de la generación de Serrano golpearon las puertas de los despachos. Y ellas no se callaron. En 2016, la sección se profesionalizó. El reto dejó de ser España. Siempre con Melanie en la plantilla, el club azulgrana se animó a competir entre los mejores de la Champions. Llegaron a la final en 2019 y conquistaron Europa la temporada pasada. El próximo sábado, defenderán el título en la final ante el Lyon.

A pesar de esos éxitos, Melanie Serrano quiere seguir luchando por mejores condiciones en el fútbol femenino. Su intención es aportar a la entidad culé, tras culminar sus últimos partidos como jugadora profesional. “En este nuevo proyecto podre enseñar todo aquello que he aprendido en esta casa, quiero se valore cada detalle. Hoy en día el fútbol femenino no se parece en nada a lo que era en mis inicios. Soy una luchadora y siempre lo seré”, indicó.