La afición culé, en en encuentro en el Camp Nou / EFE

La afición culé, en en encuentro en el Camp Nou / EFE

Culemaníacos

El origen del apodo 'culé'

Los primeros aficionados del Barça dieron a conocer el sobrenombre por su forma de sentarse en el primer campo azulgrana

29 octubre, 2021 21:00

En los inicios de la historia del FC Barcelona no existía el campeonato liguero. Aún así, se congregaban más de 6.000 personas en el Campo del Carrer Industria para ver a su equipo. El Campeonato de Catalunya y la Copa de España eran los únicos torneos que disputaban los jugadores azulgranas. Entre el año 1909 y el 1922

La expectación comenzó a ser tal que muchos seguidores tenían que ingeniárselas para ver el partido. Sin asiento, algunos de ellos se sentaban en la última fila, sobre el muro, y con la espalda dando a la calle. Aquí es donde comienza la historia. La forma de sentarse hacía que la mayoría de fieles barcelonistas mostraran algo más que la espalda. Es decir, el culo. Cuando pasaba la gente por la calle y miraba hacia arriba veía a los seguidores mostrándolo. 

Los aficionados culés se sentaban en el muro del Campo del Carrer Industrias

Los aficionados culés se sentaban en el muro del Campo del Carrer Industrias

Los aficionados del Barça se sentaban en el muro del Campo del Carrer Industrias

Se les apodó como culers y, con el tiempo, se españolizó en culés. Tal fue el éxito que, hoy en día, es un uso habitual y representativo de los aficionados azulgranas. 

Merengues, los rivales blancos

El Real Madrid también tiene en sus orígenes el inicio del sobrenombre de merengues. En 1913, Matías Prats utilizaba esa expresión para narrar los partidos del equipo madridista y la prensa siguió utilizándolo con el paso de los años. 

Otro jugador del Real Madrid arremete contra el Balón de Oro de Messi / EFE

Otro jugador del Real Madrid arremete contra el Balón de Oro de Messi / EFE

Rodrygo, Alaba, Vinicius y Kroos, cuatro de los 10 extranjeros del Madrid titulares en el Clásico / EFE

No es el único apodo de los de Chamartín, a los que también se les conoce como vikingos desde la época del 1960, donde el Real Madrid de Di Stéfano arrasaba por Europa. Por esta similitud, algunos diarios acogieron la palabra hasta el día de hoy. 

Los aficionados del Atleti, el otro equipo de Madrid, utilizan este segundo apodo para referirse a ellos de forma despectiva. 

Un atlético es un colchonero

El Atlético de Madrid es un equipo guerrero. De hecho, su apodo sale a la luz en la época de la posguerra en España. Los colchones tenían las mismas rayas y los mismos colores que la camiseta del Atlético. Una coincidencia que gustó a los seguidores y que han mostrado con orgullo hasta el día de hoy. 

Antoine Griezmann en su presentación con el Atlético de Madrid / EFE

Antoine Griezmann en su presentación con el Atlético de Madrid / EFE

Antoine Griezmann en su presentación con el Atlético de Madrid / EFE

Los indios es la otra forma de llamarlos. Como pasa en el otro bando, el Real Madrid lo utiliza de forma despectiva, al ser ellos llamados vikingos. En los años 60, la plantilla del Vicente Calderón estaba repleta de jugadores sudamericanos. Lejos de ser una ofensa, acogieron el sobrenombre porque ellos también vivían cerca del río, como los indios americanos. 

Otros apodos

A casi todas las aficiones se les conoce con un nombre. Los leones, del Athletic Club. Los nervionenses, del Sevilla. La Real Sociedad, actuales líderes de LaLiga, los txuri urdin. Unos de los más utilizados, los granotas del Levante

Otros que de su apodo han hecho una mascota. El periquito, del Espanyol. El babazorro, del Alavés. El pío pío, de Las Palmas. Pocas cosas más tradicionales que los sobrenombres de las aficiones.