Los riesgos que asume el Barça con las palancas económicas

El próximo 16 de junio es una fecha importante en la historia del FC Barcelona. En ese día se va a celebrar la siguiente Asamblea Extraordinaria, en donde la directiva de Joan Laporta pedirá a los socios compromisarios que voten positivamente a las primeras palancas económicas que tienen sobre la mesa, como es el caso de Barça Licensing & Merchandising, S.L. (BLM) y los derechos de televisión.

Sin embargo, dichas palancas comportan unos riesgos que deben tomar en cuenta la masa social del Barça. Ese lado negativo lo hemos explicado en Culemanía en el último debate, que tiene como objetivo detallar lo que representaría para la entidad culé activar esos planes del presidente. Ese plan de Laporta es una bombona de oxígeno en el corto plazo, en especial de cara a moverse en el mercado de fichajes, pero también significa comprometerse a largo plazo a unos acuerdos que pueden ser peligrosos para la estabilidad del club.

“El Barça tendría que devolver 34 millones al año”

Durante el debate de Culemanía, el periodista Lluís Regàs señaló que “Laporta piensa en el corto plazo por las urgencias económicas que tiene, además de la necesidad de reconstruir un equipo que está tocado. La junta directiva pedirá a los socios la autorización para vender el 49% de BLM y un máximo del 25% de los derechos televisivos procedentes de la Liga. La idea es conseguir de inmediato, aunque eso significaría sacrificar el futuro económico de la entidad”.

Del mismo modo, el director de Culemanía, Víctor Malo, expresó lo siguiente: “Las últimas informaciones indican que la junta intentará que esa cifra sea menor, entre el 10% y 20%. En el caso que se haga con el 20%, el Barça tendrá que devolver anualmente unos 34 millones de euros, que en 50 años serían 1.700 millones a cambio de recibir ahora 540 millones. El riesgo es que el club renunciaría al equivalente a un fichaje al año y, sobre todo, si esto no sale bien existe el riesgo de convertirse en SAD”.

Joan Laporta en el palco del Camp Nou junto a la directiva del Mallorca / EFE

Joan Laporta en el palco del Camp Nou junto a la directiva del Mallorca / EFE

La necesidad de fichar en el mercado

El principal motivo que impulsa a Laporta a activar esas mencionadas palancas es la necesidad de revertir los números negativos y, por ende, dejar en una buena posición al club para moverse en el mercado de fichajes. En este sentido, Regàs considera que “la mayoría de los jugadores a los que puede optar el Barça son de segundo nivel, como es el caso de Marcos Alonso o César Azpilicueta”.

Del lado merengue, con la participación de Alejandro Tercero, comenta que “es peligroso hipotecar por medio los derechos televisivos, sin contar que ese dinero pueda ir a más por el aumento de los ingresos. Además, que esos 540 millones no serán solo para fichajes, sino que deberán distribuirse para tapar agujeros. Es una cosa bastante seria”.