Quizás ha llegado tarde pero ha llegado. La imagen de Pjanic como azulgrana me hubiera gustado verla hace un par o tres de años pero sinceramente, y aunque al principio la operación no me acabó de convencer, a día de hoy su fichaje me parece un gran acierto.

Su llegada supone un salto de calidad en la plantilla y tengo ganas de verlo junto a De Jong. Pjanic es un futbolista que parece caído del cielo para jugar en el sistema que propone Ronald Koeman. Precisamente, tanto él como De Jong pueden ser los grandes beneficiados del 4-2-3-1 donde el doble pivote tendrá un papel determinante.

En los últimos cursos el bosnio se ha convertido en uno de los grandes centrocampistas de Europa con la Juventus donde ha demostrado tener varios registros y donde se ha adaptado a todo tipo de estilos y esquemas de juego. En este aspecto es mucho más completo que Busquets o De Jong y es un acierto tener a un jugador de estas características en la plantilla.

Experiencia y calidad a partes iguales. Ilusión y ganas de triunfar. Con su discurso de ayer, Pjanic dejó claro que llega al Barça con las ideas claras, con personalidad y con ganas de dejar huella. Ojalá le vaya muy bien, a mi ya me ha ganado.