Un chorreo. Un auténtico chorreo. Lo que consiguió España contra Alemania es una humillación en toda regla que no olvidaremos nunca jamás. Si hace menos de 24 horas poníamos en duda el método Luis Enrique, ayer el asturiano calló muchas bocas y cerró muchos debates. ¡Justicia!

En junio de 2015, cuando ganó el triplete, se le reconoció muy poco el trabajo a Luis Enrique. Algunos se dedicaron a vender que los éxitos del Barça fueron únicamente gracias al tridente formado por Messi, Suárez y Neymar, la famosa 'MSN'. Algunos intentaron hacernos ver que todo lo que se ganaba era gracias a estos tres fenómenos. Pues mentira, Luis Enrique también tuvo como mínimo la misma parte de culpa que la 'MSN' de los éxitos del Barça. Quedó comprobado cuando se fue en 2017, desde entonces el club y el equipo comenzaron con su caída libre particular.

El partido de ayer ya forma parte de la historia del fútbol. Como el 2-8 del Bayern, el 6-1 al PSG o el 2-6 al Madrid. Gayà, Rodri, Koke, Fabián, Morata, Olmo y Ferran Torres a quien por cierto también, se le escapó al Barça. 23 millones de euros más 12 en variables, el jugador del Manchester City era un regalo que Guardiola está sabiendo aprovechar.

A la selección todavía le faltan algunas piezas como Ansu Fati pero creo que guarda muchos paralelismos con el Barça. Es un equipo en construcción donde los jóvenes empiezan a ganar galones. Si se tiene paciencia y se les deja trabajar, pueden volver a darnos grandes alegrías.

Luis Suárez, querer y no poder

La baja de Luis Suárez es una mala noticia. Primero y sobre todo por su salud y luego en el ámbito deportivo. No podremos ver un cara a cara con su inseparable amigo Leo Messi. Era un duelo con mucho morbo y ahora es un gran contratiempo para Simeone.

¡Malditas selecciones! En el Juventus-Barça ya nos quedamos sin un Messi contra Cristiano porque el portugués dio positivo por coronavirus en una ventana FIFA. Y, ahora, Suárez también se perderá el duelo contra su ex equipo, por el mismo motivo y en una nueva ventana de selecciones. Queda claro, el virus y los viajes internacionales son la peor combinación posible.

Si hace unos días algunos planteaban hacer un boicot casi imposible a estos parones, ahora ya no nos parecería tan descabellado llevarlo a cabo. No todo es lícito para que las federaciones se llenen los bolsillos. La salud es lo primero y los jugadores y los clubes deberían alzar la voz de una vez por todas.

No nos engañemos, el positivo de Luis Suárez le resta todo el morbo al partido entre el Atlético de Madrid y el Barça del próximo sábado. Seguirá siendo un gran partido sí, pero sin el aliciente de ver al charrúa contra sus ex. Algunos respirarán tranquilos sabiendo que el 'pistolero' no protagonizará las portadas del domingo mientras que los otros aún no se han lamentado bastante por su ausencia. Y con todo, insisto, salud para Luis Suárez y que se recupere pronto.

Eramos poco y parió Bordas...

Mbappé, Neymar y Halaand, la santísima trinidad del fútbol mundial, el futuro asegurado para cuando no estuviera Messi. No sé cuál era la intención del señor Bordas con la entrevista que concedió el domingo a 'Mundo Deportivo' pero si su finalidad era apaciguar los ánimos y colgarse una medallita con el 'casi' fichaje de estos tres futbolistas, consiguió todo lo contrario.

Con estas confesiones sólo generó más impotencia y malestar entre los culés. Sólo consiguió volver a dejar en evidencia la incompetencia de la antigua junta directiva presidida por Josep Maria Bartomeu.

Se ha llegado a un punto donde ya nada nos sorprende con los antiguos directivos, el club económicamente es un drama, con los jugadores la relación acabó siendo entre muy mala e inexistente, y con los socios el coronavirus les salvó de algunas de las pañoladas más sonoras de la historia. El Barça está a punto de estallar por todos lados y ahora Bordas entona un papel de víctima apuntando un linchamiento injusto a Bartomeu. Injusto? De verdad?

Si aún tuvieran un poco de dignidad y estima por el Barça no abrirían la boca y desaparecerían del mapa. No fardarían de los NO fichajes. No entonarían este discurso victimista y menos se atreverían a juzgar las formas de Leo Messi. Mucho me temo sin embargo, que de eso no han tenido nunca.