El verano de las celebrities ya no es como el de hace unos años. Los posados de Ana Obregón y las fiestas en Marbella han pasado, ya desde hace tiempo, al escenario de Ibiza y los jugadores de fútbol van buscados. Todo empezó en la época de Eto’o. Me acuerdo que el mismo Enric Bayón, por aquél entonces reconocía que como paparazzi, hasta la fecha, no le compraban las fotos de los futbolistas. Pero todo cambió. Y gracias a ellas, podemos entender el rendimiento, menor o mayor, que puedan acabar dando algunos figuras. Un dato numérico: Leo Messi lleva 21 días de vacaciones, primero en Miami y ahora en Ibiza. Y justo quedan 13 días, mala cifra, para que comience la Liga y sigue sin tener contrato ni ficha de azulgrana.

Otro que se ‘come’ la ciudad por verano es Ansu Fati. No Barcelona, si no Madrid. Es en la capital española donde se recupera de una lesión que, muy a mi pesar, ya avancé que no tendrá nunca el final esperado.

En paralelo, en el terreno de juego vemos cómo se confía en Demir, Gavi o Nico. Mientras que en el banquillo siguen Umtiti o Coutinho. La Liga lo acabará poniendo todo en su sitio. O sea, los canteranos en el banquillo, igual que Umtiti.

Y para terminar, en este repaso vacacional encontramos a Piqué. Él, que va por libre, le ha dado por hacerse selfies de su cara acompañado de una palabra o una frase, teóricamente, divertida. La cuelga cada día en Instagram desde hace ya más de una semana. En la vida, las cosas nunca se hacen ‘porque sí' y todo apunta a una finalidad comercial o la promoción de su faceta empresarial. Hace gracia, es misterioso y tiene la cara para hacerle una foto cada día. Pero veremos los selfies que se hace cuando vengan las derrotas, un momento crudo en el vestuario o sencillamente algún pequeño fracaso.

¿De momento? Disfrutemos todos de las vacaciones que a todos nos hacen falta.