Toni Freixa está protagonizando una espectacular remontada. Da la sensación de que ya ha superado a Víctor Font y de que se disputará la presidencia con Joan Laporta, quién está viendo reducida considerablemente su ventaja. El candidato de “Fidels al Barça” está realizando la mejor campaña electoral de los tres. Tiene un programa muy elaborado, basado más en propuestas concretas que en nombres, un discurso muy claro y coherente gracias a su alto conocimiento de las diferentes áreas del club, y un proyecto deportivo centrado en recuperar la esencia del modelo formativo de la Masía y de estilo de juego, con la ayuda de profesionales, como Lluís Carreras, que sí hacen campaña por él. Además, su buena oratoria y seguridad están convenciendo a muchos de los socios indecisos. Acaba de dar un golpe de efecto anunciando el fichaje de dos cracks delanteros y un defensa diferencial para el próximo verano gracias a un acuerdo que ha conseguido con un inversor que pagará 250 millones al club por el 49% del Barça Corporate. Freixa está demostrando estar preparado no solo para ganar las elecciones sino para aplicar inmediatamente su plan deportivo y económico para reconstruir el club en tiempo récord.

Mientras tanto, el golpe de efecto que supuso la lona de Joan Laporta se está diluyendo. El socio está recelando de él ante su falta de propuestas, sus ausencias en los debates y su inconcreto proyecto deportivo. Parece que no le dejen hablar para que no se equivoque. Su programa está lleno de dudas y contradicciones. Primero dijo que no iba a desvelar su proyecto deportivo y que daría continuidad a Koeman y Ramón Planes, ahora parece que presentará otro director deportivo diferente. En lo económico apuesta por una emisión de bonos regulados por la CNMV, según dijo Jaume Giró, pero que luego se autodesmintió él mismo. De todas maneras, endeudarse pagando intereses más altos que los bancarios no parece la mejor receta económica. Y del Espai Barça, Laporta primero apostó por ir a jugar 2 años a Montjuic y ahora ya no le parece tan buena idea pero tampoco lo descarta. Ni sí ni no sino todo lo contrario. La campaña de Laporta está llena de dudas y está dejando mucho que desear. Y Víctor Font se ha quedado sin espacio. Basó su campaña en Xavi y Jordi Cruyff y le han dejado más solo que la una. No transmite. Solo se aferra al concepto de que él es el futuro cuando nadie puede apropiarse de las nuevas etapas. Se necesita algo más que un buen perfil de consultor. Se ha quedado sin espacio. Hay partido y parece que lo jugarán Laporta y Freixa.