La obsesión 'guardiolista' de Zidane tras olvidar a Pogba

La revolución de Zinedine Zidane se quedó a medias. Cuando el técnico regresó al banquillo del Real Madrid todo parecía indicar que cambiaría por completo la plantilla. Los pronósticos se cumplieron en el mes de junio, cuando de una tacada llegaron Mendy, Jovic y Hazard, que se sumaron a Militao, fichado en marzo, y a Rodrygo, atado desde el pasado verano.

El siguiente debía ser Pogba o, en su defecto, un centrocampista que pudiera poner en peligro la titularidad de Luka Modric y Toni Kroos. El centrocampista francés se convirtió en la gran prioridad de Zizou. Pero pasaban los días y las semanas y el deseado del técnico no llegaba debido a las constantes negativas del Manchester United.

Las opciones para que el futbolista francés vista de blanco se redujeron al mínimo el pasado jueves con el cierre del mercado en la Premier League. Si bien es cierto que los clubes ingleses aún pueden vender a sus jugadores, parece complicado que en Old Trafford dejen salir a su estrella tras no fichar a ningún reemplazo.

Su nueva obsesión

Con Pogba olvidado, Zidane ahora está centrado en su otra gran obsesión: la Liga. Aunque desde Madrid acostumbran a situar la Champions por encima del campeonato doméstico, el francoargelino siempre ha admitido que para él "lo más importante es la Liga, es el día a día, lo más complicado de conseguir".

Zidane en uno de los partidos de pretemporada / EFE

Zidane en uno de los partidos de pretemporada / EFE

Un deseo que no se refleja en su palmarés, pues en sus tres primeros años como entrenador del Real Madrid solo ganó una vez la competición de la regularidad. Por eso, en abril advirtió que sería su gran objetivo para esta temporada: "Vamos a intentar empezar la Liga de la mejor manera, va a ser muy importante desde la pretemporada. Hay que meterlo como primer objetivo".

El conjunto blanco empezará su andadura en la competición doméstica el próximo sábado ante el Celta en Balaídos y, a juzgar por los resultados cosechados durante el verano, Zidane no ha logrado su cometido. El equipo llega con muchas dudas al inicio del campeonato y las sensaciones que se desprenden de su juego insinúan que, si no hay una mejora milagrosa, podría volver a perder la Liga en octubre.

Guardiola como espejo

Zizou ha heredado esta obsesión por la Liga de uno de sus grandes referentes, Pep Guardiola. El de Santpedor siempre ha manifestado que "la Liga es el título más importante", tanto cuando entrenaba al FC Barcelona como durante su estancia en los banquillos del Bayern de Múnich y el Manchester City.

Laporte recibiendo órdenes de Pep Guardiola / EFE

Laporte recibiendo órdenes de Pep Guardiola / EFE

El técnico del Real Madrid nunca ha ocultado su admiración por el exazulgrana. De hecho, cuando Pep dirigía al cuadro bávaro y Zidane todavía estaba en fase de formación como entrenador, acudió junto con Makelele y Sagnol a Baviera para conocer los métodos de Guardiola y observar una serie de entrenamientos.

Zidane tiene una nueva obsesión. La Liga es el gran objetivo del técnico francoargelino esta temporada. El fútbol es impredecible, pero la pretemporada del Real Madrid ha demostrado que el equipo blanco está muy lejos del nivel óptimo y esperado a escasos días para que empiece el campeonato.