Una foto de Zinedine Zidane durante el Real Madrid - Valladolid / EFE

Una foto de Zinedine Zidane durante el Real Madrid - Valladolid / EFE

Real Madrid

El Zidane de hace tres meses y el Madrid de hace cuatro años

El conjunto blanco vuelve a dejar muchas dudas en defensa con un once repleto de 'viejas glorias'

25 agosto, 2019 11:04

Revolución inédita y radical. Así se prometía el verano de 2019 en Concha Espina, pero las expectativas han acabado topándose con una realidad más que dolorosa. El Real Madrid volvió a las andadas ante el Valladolid en su estreno liguero en el Santiago Bernabéu contra el Valladolid. Un equipo con toque y calidad, evidente con la plantilla que tiene, pero con unas carencias ofensivas de cara a gol que se mantienen y unos defectos defensivos preocupantes. 

El Madrid asedió el área de los pucelanos, pero sin puntería fue imposible batir a Jordi Masip. Y cuando la tuvo, el cancerbero catalán apareció. Tan solo Benzema pudo anotar el único tanto madridista de la noche. Un error defensivo permitió al francés anotar el primero de la noche. El Valladolid se ciñó al plan y salió semi-victorioso. Un punto en un estadio más que complicado sobre la bocina pese haber tenido ocasiones más claras que los blancos a la contra. 

El Madrid volvió a dejar ver sus carencias ofensivas, agravadas desde la salida de Cristiano Ronaldo y que devolvieron el runrún al Santiago Bernabéu, y no es para menos. El enfado de Zidane tras el empate fue descomunal, pero el técnico tampoco tuvo recursos suficientes. La entrada de Vinicius dio verticalidad al equipo, pero el brasileño es un jugador por descubrir, no una estrella consagrada. Jovic tampoco pudo añadir mucho a la noche y la aparición de Lucas Vázquez fue testimonial. 

Viejas glorias

Zidane volvió a ser el mismo de hace tres meses. Incluso de hace un año y medio. Sin alternativas reales para cambiar el guión del partido y sin un banquillo capaz de girar las tornas de un partido atascado de cara a portería. Su revolución, a la que Florentino Pérez dio vía libre, no se ha producido. Tan solo Hazard ha reforzado el equipo y estaba en la grada. Pogba parece que no llegará y el resto de fichajes responden a la política de futuro del club, no a la planificación deportiva ideada por el galo. 

Una foto de James y Zidane durante el Real Madrid - Valladolid / EFE

Una foto de James y Zidane durante el Real Madrid - Valladolid / EFE

Una foto de James y Zidane durante el Real Madrid - Valladolid / EFE

De hecho, y sin ir más lejos, el Santiago Bernabéu acudió al estadio a la espera de ver a su nuevo Real Madrid y se encontró, sorprendentemente, con una alineación de 2015. Un déjà vu inesperado que fue recibido con ovaciones y que acabó generando las mismas dudas que por aquel entonces. Un once que en su mayoría estuvo presente en las tres Champions consecutivas del Madrid (2016, 2017 y 2018), pero que respondió más a un viaje al pasado que a la revolución que ideó en su pizarra Zidane cuando volvió al Madrid la temporada pasada. 

Del once que alineó el técnico francés, solo Courtois no estaba en la temporada 2015-2016. El resto de jugadores, los diez de campo, ya estaban en la temporada 2015-16. Carvajal, Sergio Ramos, Varane, Marcelo, Casemiro, Kroos, James, Bale, Benzema e Isco ya estaban en Chamartín hace cuatro años. Un once muy veterano y con una media de edad de 29'4 años. Una revolución tan extraña, como falsa.