El clásico de Las Vegas mejora la Champions Cup de hace tres años

Mucho ha llovido desde la última gira de pretemporada del FC Barcelona en Estados Unidos. Tres años después de haber participado en la edición 2019 de la International Champions Cup (ICC), el equipo azulgrana regresa a tierras norteamericanas para preparar como es debido la próxima campaña 2022-23. Y lo hará a lo grande, con un clásico ante el Real Madrid que se une a tres partidos más frente a la Juventus de Turín, los New York Red Bulls y el Inter de Miami. La costa oeste de EEUU, de esta forma, contará con varios partidos que enfrentarán entre sí a los tres impulsores de la Superliga Europea, y que reportará una suculenta cantidad de dinero a las arcas del Camp Nou.

Hace tres años, Barça y Madrid acumulaban el 50% de los ingresos por amistosos jugados en pretemporada de todo el fútbol español. El caché habitual de los eternos rivales rondaba los tres millones de euros por partido cuando viajaban a América o Asia, mientras que en Europa superaban los 1,5 millones de euros. Por aquel entonces, el club azulgrana fue capaz de ingresar 18,3 kilos por sus exhibiciones internacionales en la campaña 2018-2019, por los 17,5 millones en la pretemporada previa. Ahora, ya con la pandemia de Covid prácticamente superada, el Barça pretende acercarse a las cifras de antes de la crisis.

Dos agencias organizadoras en EEUU

Por el último clásico que disputaron Barça y Madrid en tierras norteamericanas --y que fue el último de Neymar Jr con la zamarra azulgrana, en 2017-- ambos equipos ingresaron seis millones de euros cada uno. En esta ocasión, el FC Barcelona quiere aumentar el listón y realizará dos giras diferenciadas en Estados Unidos, con distintas empresas organizadoras.

Por un lado, los de Xavi jugarán en Miami y New York el 19 y 31 de julio, respectivamente, de la mano de la agencia americana ISL. Paralelamente, el equipo culé participará en el recién creado Soccer Champions Tour, una nueva competición sustentada por AEG que dará guerra a la International Champions Cup. Esto permitirá al Barça jugar contra el Real Madrid el 23 de julio en Las Vegas, y frente a la Juventus el día 26 del mismo mes, en Dallas.

Montaje sobre la nueva gira americana del Barça por Miami y Nueva York / FCB

Montaje sobre la nueva gira americana del Barça por Miami y Nueva York / FCB

La pretemporada, una palanca más

En este verano de 2022, el FC Barcelona planea embolsarse nada menos que 10 kilos por los cuatro partidos que jugará ante Real Madrid, Juventus, Inter de Miami y New York Red Bulls, lo que equivale a unos ingresos de 2,5 millones por partido. Eso es la mitad de lo que se embolsó el club azulgrana en el amistoso de Australia, un total de cinco kilos por el encuentro jugado pocos días después de la última jornada de Liga, ante el Villarreal. A estos ingresos, naturalmente, habrá que añadir también los que se prevén obtener por el Trofeo Joan Gamper frente a la Roma, que se celebrará el 6 de agosto en el Camp Nou. 

Sumando el total de millones recibidos por los partidos de esta pretemporada, el FC Barcelona podrá acercarse --o incluso superar-- el dinero que generó por la pretemporada de 2019, la última disputada justo antes de la pandemia del coronavirus. Unos ingresos que vendrán de maravilla para seguir saneando las cuentas de la entidad culé, independientemente de las palancas que está previsto que se activen a lo largo de los próximos días, este mismo mes de junio, para poder cerrar el año con un balance positivo y poder cumplir con las necesidades del primer equipo en el mercado de fichajes.

El FC Barcelona jugará el Gamper contra la Roma el 6 de agosto / FCB

El FC Barcelona jugará el Gamper contra la Roma el 6 de agosto / FCB

Preámbulo contra Boca Juniors en Riad

Además del amistoso de Australia y de los que están previstos para la pretemporada de este verano de 2022, cabe recordar que en diciembre de 2021 el FC Barcelona ya logró embolsarse algo más de dos millones de euros por un partido de exhibición en Riad (Arabia Saudí). Fue celebrado el 14 de diciembre contra Boca Juniors, y sirvió para homenajear a un Diego Armando Maradona que falleció en 2020, y que había militado en los dos clubes.

Queda claro, en este sentido, que la junta de Laporta y su planificación estratégica están poniendo en valor este tipo de herramienta, la de aprovechar el tirón mediático del Barça en el extranjero, para ganar un dinero muy necesario por una serie de partidos que, además, sirven de gran ayuda para la puesta a punto del equipo de Xavi. El objetivo es claro: que de cara a la próxima temporada 2022-23, el FC Barcelona se encuentre mucho más armado deportivamente hablando y, por supuesto, a nivel económico. Los cimientos para que eso suceda ya se están colocando, uno tras otro.