La historia de tensiones entre Luis Enrique y Jordi Alba

Jordi Alba fue la gran sorpresa en la última convocatoria de la selección española. El gran rendimiento que está ofreciendo el lateral de l'Hospitalet en el FC Barcelona obligó a Luis Enrique a citarle para los duelos contra Grecia, Georgia y Kosovo, correspondientes a la fase de clasificación del Mundial de Qatar.

El futbolista catalán vuelve a la Roja más de 18 meses después. Alba no viste la camiseta de la selección desde septiembre de 2019, en un choque contra Rumanía que pertenecía a la clasificación para la Eurocopa. Por aquel entonces, Robert Moreno estaba al frente de la Roja tras la renuncia de Luis Enrique por motivos personales.

El preparador asturiano regresó al cargo en noviembre de 2019 y Jordi Alba desapareció de las convocatorias de la selección española. No es ningún secreto que la relación entre el técnico y el lateral no es la mejor, pero ¿dónde y cuándo empezó el historial de tensiones existente entre el entrenador y el futbolista?

Bronca en París

Ambos coincidieron en el FC Barcelona entre 2014 y 2017. El carrilero fue un jugador muy importante en los esquemas de Luis Enrique en sus dos primeras temporadas y media, pero todo cambió a raíz de la humillación que sufrió el conjunto azulgrana en París el 14 de febrero del año 2017 (4-0).

Di María y Verratti celebran un gol en el 4-0 / EFE

Di María y Verratti celebran un gol en el 4-0 / EFE

Antes de que empezara el partido, el técnico ya advirtió a Jordi Alba que gran parte de la eliminatoria pasaba por los pies de Ángel di María. El extremo argentino adelantó al PSG en el marcador e hizo mucho daño al Barça en la primera mitad. Y al descanso, Luis Enrique recriminó al lateral que estaba haciendo caso omiso a lo que le había dicho y que le estaba poniendo las cosas muy fáciles al Fideo.

El futbolista de l'Hospitalet completó los 90 minutos ese día, pero perdió importancia en los esquemas de Luis Enrique a raíz de la visita al Parque de los Príncipes. El 4-0 desencadenó una guerra entre ambos que no dejó de empeorar hasta que el asturiano dejó el banquillo del Barça el verano de 2017.

Suplencias y pullas

Alba ya no fue titular en el 6-1, donde Lucho apostó por un 3-4-3, ni tampoco en la ida de cuartos de final contra la Juventus. Se perdió otros compromisos igualmente importantes, como el duelo contra el Atlético de Madrid. Siguió contando con minutos, pero no era tan importante como antes de París.

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Busquets y Jordi Alba, en un choque con España | EFE

Cuando el asturiano salió del Camp Nou, Jordi Alba no dudó en mandarle varios dardos. Tras la llegada de Ernesto Valverde apuntó que "seguro que me va mejor que con Luis Enrique. No he tenido los minutos que tenía, pero espero que ahora me vaya mejor". Sobre Lopetegui, su seleccionador en aquel momento, señaló que "se agradece que vaya de cara".

Por mucho que ahora el lateral vuelva a la selección, parece improbable que la relación entre ambos vuelva a ser lo que era. Así lo insinúan las palabras que pronunció Luis Enrique tras citar a Alba: "Creo que es positivo que conozca tanto a Jordi y que él me conozca tanto a mí. Ya sabe de qué pie cojeo. Ahora mismo, de ninguno".