Ya ha pasado una semana desde la peor noche de la historia reciente del Barça. Los aficionados están desanimados. Buscan culpables y piden cabezas. Los culés lamentan que pasa otro año con Messi pero sin Champions. Los merengues se felicitan por lo mismo. Vamos a ver si las sensaciones se corresponden con la realidad. Vamos a comprobar si el club azulgrana está desaprovechando la era del mejor jugador de la historia.

Para ello, empecemos por analizar el Barça de Kubala. Laszlo, considerado el mejor jugador de la historia del club hasta la llegada de Messi, llegó a la entidad en 1950 y se despidió de ella en 1961. Disputó 27 torneos con la elástica azulgrana. Ganó 12 (entre ellos, cuatro Ligas y cinco Copas); es decir, el 44,44%. Su Barça fue el primer equipo que apeó de Europa al Madrid abusón de su amigo Di Stéfano. ¿Se puede decir que el Barcelona desaprovechó a Kubala? ¿Pudo aquel once llenar más las vitrinas?

Sigamos por el Madrid de Alfredo Di Stéfano. La Saeta Rubia defendió la camiseta blanca 11 temporadas (1953-64) en las que ganó 17 de los 34 torneos que disputó. La mitad. El 50%. Entre los títulos destacan ocho Ligas y cinco Copas de Europa (la sexta la perdió ante el Benfica tras ponerse 2 a 0 en el marcador, ¡eso sí que es doloroso!). La Copa fue su gran frustración, como él mismo reconoció. Al final de su carrera, y tras hincar la rodilla en tres finales, ganó una. ¿Desperdició el Madrid la era Di Stéfano?

Continuemos por el Santos de Pelé, equipo en el que Edson Arantes do Nascimento militó durante 17 temporadas (1957-74). Disputó 37 campeonatos; ganó 21: el 56,7%. Misma pregunta. Cada lector que responda interiormente lo que considere.

Después de Pelé llegó el Ajax de Cruyff (1964-73 y 1981-83). Aquel equipo celebró 19 títulos en 32 torneos, entre los que destacan tres Copas de Europa, ocho ligas y cinco Copas. El porcentaje de éxito es del 59,3. Sin embargo, Cruyff también ilusionó al Camp Nou (1973-78), aunque en sus cinco temporadas en Cataluña solo conquistó dos de los 11 títulos en juego: el 18,18%. Aquello sí que fue desaprovechar a uno de los mejores futbolistas de la historia.

Del mismo modo desperdició el Barça a Maradona (1982-84). El triste palmarés de El Pelusa en Barcelona se ciñe a dos títulos sobre siete posibles (28,5%). Peores, del 25%, fueron sus registros en el Nápoles (1984-91), aunque la situación en el club italiano era distinta. Era inimaginable que aquel equipo levantase en tan pocos años dos Ligas, una Coppa y una UEFA, entre otros éxitos. Él obró el milagro. Y allí, en el bar Nilo, le han dedicado una capilla con reliquia incluida, ¡un mechón de pelo! Centenares de beatos se acercan hasta ese lugar para honrar su memoria.

También en Italia, en concreto en la Juventus, jugó otro de los grandes futbolistas de la historia. Es el turno de Zidane. En sus cinco temporadas de bianconero (1996-2001) jugó 20 torneos, de los que ganó siete (incluida una Champions y dos Ligas). Es decir, el 35%. ¿Desaprovechó la Juve a Zizou? ¿Y lo hizo el Madrid de los galácticos (2000-06)? Porque la etapa de Figo, Zidane, Ronaldo y Beckham en Chamartín terminó con más pena que gloria: siete títulos (eso sí, una Champions y dos Ligas) sobre 22, el 31,8% del total.

Llegados a este punto, queda por analizar los equipos de los dos grandes de nuestros días. Cristiano Ronaldo llegó al Real Madrid en la temporada 2009-10, y allí estuvo nueve años. Con sus goles ayudó a conseguir el 43,2% de los títulos en juego (16 sobre 37). Hay que añadir que, de ellos, solo la mitad corresponde a los tres grandes (Liga, Copa, Champions). Su gran suerte es que se llevó con él cuatro Orejonas. ¿Desaprovechado?

Y, ahora sí, Messi. Debutó en el primer equipo del Barça en el aciago curso 2003-04. Desde entonces, sin embargo, el equipo se encuentra inmerso en su época dorada. Con Leo, el FC Barcelona ha completado 65 campeonatos, de los que ha ganado 34: el 52,3%. Aquí se incluyen cuatro Champions, seis Copas y diez Ligas. Un sextete y otro triplete (nadie más lo ha logrado). Si este año gana al Valencia, el porcentaje ascenderá hasta el 53; si pierde, se quedará en el 51,5. Por ahora. Es más, el Barça de Messi acostumbra a pelear todos los títulos hasta el final; no hace como otros. Pero podemos hilar más fino, porque en sus primeros años la aportación del astro argentino fue testimonial. Por lo tanto, si contamos a partir de la campaña 2005-06, el Barça de Messi ha ganado el 55% de los títulos. Y si lo hacemos desde la 2008-09, el momento de la gran eclosión del 10, el porcentaje asciende ¡hasta el 61,7!

Ya cantaba Julio Iglesias que, “al final, las obras quedan; las gentes, se van”. ¿Está desaprovechando el Barça la era Messi? Yo digo que no.