Pep Guardiola durante un partido en su etapa como entrenador del Barça / EFE

Pep Guardiola durante un partido en su etapa como entrenador del Barça / EFE

Palco

Guardiola se pasa de frenada en su intento por politizar el Barça

El ahora técnico del Manchester City manda un mensaje sobre el 'procés' a riesgo de fracturar el club

22 noviembre, 2018 11:15

Pep Guardiola ha vuelto a las andadas. Una vez más, el metódico entrenador no ha sabido discernir entre su particular visión de la situación política que atraviesa Cataluña y la que debe representar el FC Barcelona como entidad en una sociedad completamente fracturada.

Los mensajes que mandó este miércoles el técnico del Manchester City durante una conferencia en la Universidad de Liverpool solo pueden llevar a la factura del Barça como club, emulando lo que ocurre en la sociedad catalana desde hace ya unos años.

El exjugador y exentrenador del FC Barcelona reclama al club azulgrana que "juegue un papel importante en el procés", y considera que, si se diera el caso de que quedara fuera de la Liga española en el futuro "sería lo de menos", porque "si la sociedad toma una decisión, ya se encontrará la solución".

"Por supuesto que el Barcelona debe jugar un papel importante. Es imposible entender el Barcelona sin saber lo que pasó en Cataluña en el pasado. Imposible. Pero entiendo que a veces estar en la directiva o siendo el presidente debes gestionar la situación, los poderes... hay que hacer equilibrios porque no es fácil. No podemos negar que el Barcelona es muy importante para la identificación de nuestra lengua y nuestro país", declaró durante la conferencia.

"El Barcelona debe jugar un papel importante"

El actual técnico del Manchester City hizo su peculiar análisis de la situación política catalana. Según su opinión, "la persecución que hay en Cataluña no es sólo política, ya que también afecta a músicos o líderes sociales". Y pone en duda el papel de la Unión Europea sobre este tema, al apuntar que desconoce "si lo está haciendo todo por defender los Derechos Humanos. No lo sé. No soy abogado y no puedo hablar de eso".

El exentrenador del Barça, Pep Guardiola, durante su conferencia en Liverpool / @jordifinestres

El exentrenador del Barça, Pep Guardiola, durante su conferencia en Liverpool / @jordifinestres

El exentrenador del Barça, Pep Guardiola, durante su conferencia en Liverpool / @jordifinestres

Guardiola salió en defensa a los líderes del procés en prisión preventiva o fugados por el referéndum ilegal del 1-O y la declaración unilateral de independencia del 27 de octubre del año pasado. Y explicó cómo fue su visita de la semana pasada a Lledoners: "Hace unos días fui a la cárcel, vi a los presos e hice una conferencia. Estuve dos horas allí y fue un momento emocionante. Pude ver cómo es de injusto que estén allí por expresar su opinión, y están acusados por hasta 25 años".

Pep llama a la revolución 

El exjugador y exentrenador barcelonista cree que "lo que pasa en Cataluña es un movimiento pacífico, y el poder lo tiene la gente". Y recordó que "el presidente del país (Carles Puigdemont) está en el exilio, hay presos políticos y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, está en la prisión. Diez personas, en el exilio y gente en la prisión. Esto ya no es sobre tener una Cataluña independiente o no. Es simplemente sobre dejarlos votar", apuntó, obviando que la votación incumplía la Constitución y la legislación española. Aunque apuntó que a Puigdemont "lo acusaron en España de rebelión y Alemania, que lo juzgó, dijo que esto no pasó. Creo que hicieron un buen trabajo".

Pep Guardiola y Xavier Torres a las puertas de Lledoners / JORDI CUIXART

Pep Guardiola y Xavier Torres a las puertas de Lledoners / JORDI CUIXART

Pep Guardiola y Xavier Torres a las puertas de Lledoners / JORDI CUIXART

“El futuro perfecto es democracia, democracia y más democracia. No puede haber otra solución. Creo que la gente de Cataluña involucrada en este proceso lo ha intentado hacer de esta manera”, afirmó. Unas palabras que contrastan con su mutismo sobre Qatar, país en el que vivió y jugó dos años, del que fue embajador para el Mundial 2022, y del que en su día dijo que sus ciudadanos "tienen libertad". Opinión que no coincide con lo que señalan informes de organizaciones como Amnistía Internacional.