Pierre-Emerick Aubameyang pone los goles y sonríe como los jugones en el Bernabéu / EFE

Pierre-Emerick Aubameyang pone los goles y sonríe como los jugones en el Bernabéu / EFE

Primer equipo

La sonrisa de Aubameyang, un Son Goku letal en el Bernabéu

El goleador gabonés expresa su felicidad en el Barça con dos goles que destrozan al Real Madrid

21 marzo, 2022 00:39

Todos los jugones sonríen igual. Solía decirlo el mítico Andrés Montes, popular comentarista de la NBA y, en su etapa final antes de fallecer, también de la selección española de fútbol. En el FC Barcelona hay una figura que vuelve a encarnar esa característica que tanto le gustaba remarcar a Montes: se llama Pierre-Emerick Aubameyang. El Barça le ha devuelto la felicidad, como él mismo reconoce, en tiempo récord. Y su sonrisa, que recuerda a la que en su día exhibió Ronaldinho para enamorarnos, le ha devuelto la felicidad al Barça en forma de goles. Un Win-Win en toda regla. 

Este jugador de origen gabonés, aunque con familia española en un pequeño pueblo de Ávila llamado El Barraco y que tiene menos de 2.000 habitantes, llegó al club catalán sobre la bocina. Con nocturnidad y de forma sorpresiva. El entorno culé se inundó de comentarios cuestionando su incorporación, decían que era otro futbolista problemático que salía rebotado del Arsenal de Arteta y que, para colmo, era amigo de Ousmane Dembelé, el jugador más señalado por club y afición en el mercado de invierno. Únicamente el hecho de que llegaba gratis, que no había nada mejor y su pasado buen cartel internacional ayudaban a acogerle sin demasiada hostilidad, aunque con cierto recelo.

Auba, un hombre liberado

Desde Culemanía, en cambio, siempre quisimos creer en él y estamos muy orgullosos de haber acertado. El día de su presentación nos cautivó con su sonrisa especial y ya avisábamos de que técnicamente nos había sorprendido con el balón. No sintió la presión, al contrario; se movía como pez en el agua con el balón en sus pies, demostrando su habilidad dando toques y regalando más y más sonrisas. Entregado al afable presidente, Joan Laporta, cuyo carisma siempre cautiva de primeras. Auba era un hombre liberado

Se ha quitado las cadenas que le ataban en Londres y, con ese curioso pelo afro de punta que le caracteriza, puede decirse que se ha desmelenado. Su voracidad goleadora es lo que necesitaba el Barça y, a pesar de reconocer que en el Arsenal se sentía más cómodo jugando como extremo izquierdo, a las órdenes de Xavi está demostrando ser el '9' perfecto para el modelo de juego azulgrana. El entrenador catalán llegó a definirlo recientemente con un elogio espectacular: "Auba es un regalo caído del cielo". La Aubamanía ha llegado al Camp Nou

"Un regalo cáido del cielo" de "presión innegociable"

Este domingo se coronó en el Santiago Bernabéu con una actuación colosal que culminó con dos goles, con voltereta de celebración incluida en el primero, y con otras tres o cuatro ocasiones claras que no supo aprovechar, tal vez abrumado por la facilidad que tenía para encarar a Courtois. Tuvo una bastante buena antes de mojar, otra justo después y llegó a perdonar un remate a bocajarro donde el portero belga estaba totalmente vendido, pero aún así fue el mejor del Barça porque sublimó, con sus goles, una asistencia maravillosa a Ferran Torres y constante intimidación, el trabajo impecable del resto del equipo, muy solidario en las funciones ofensivas y, sobre todo, defensivas. 

El brutal guiño de Aubameyang a Dragon Ball en el Bernabéu / REDES

El brutal guiño de Aubameyang a Dragon Ball en el Bernabéu / REDES

El brutal guiño de Aubameyang a Dragon Ball en el Bernabéu / REDES 

Lo mejor que tiene Auameyang es que es un delantero comprometido, que rompe con los privilegios que encarnaban jugadores como Leo Messi, Luis Suárez o Neymar, cuyo aura de súper estrella les indultaba de implicarse en labores defensivas. El nuevo Barça de Xavi vuelve a defender, del primero al último, y esa es la verdadera clave que ayuda a explicar la resurreción que está comandando con alegría y buen fútbol el pelopo Xavi Hernández. Ya lo dijo el propio Xavi cuando le preguntaron recientemente por grandes fichajes como Haaland o Salah: "La presión es innegociable". 

Brutal guiño a Dragon Ball

Y, más allá de todas sus aportaciones como futbolista profesional, es un jugador que transmite unos feelings que enganchan y que, además, representan a toda una generación de 30 años para arriba que disfrutaron con los mismos héroes que encandilaron a Auba. Fanático de Marvel con Spiderman, Batman, Venom, Black Panther... este domingo, en el Bernabéu, Aubameyang hizo el guiño más emotivo a una generación de españoles que crecimos con Dragon Ball.

El crack de Gabón tenía una bola guardada en la manga, una bola de dragón. Se la pasó un recogepelotas y, al celebrar su segundo gol, el cuarto de la noche, la cogió alargando el brazo izquierdo y se puso dos dedos de la mano derecha en la frente, emulando el mítico canvi de lloc instantani (teletransportación, en la versión castellana, de la serie). Genio y figura, Aubamegol nos tiene totalmente entregados. A nosotros, y al barcelonismo. 

Así lo explicó el propio Aubameyang, también fanático de los coches de lujo, al término del partido: "La bola con la que celebré era de Dragon Ball, porque puedes pedir un deseo con esta bola y mi deseo era ganar el partido y marcar un gol; y es para mi familia, que vive cerca de aquí y para mis abuelos, que ya se han ido. Hacer un gol aquí siempre es algo especial".